El aceite de rosa mosqueta, también conocido como aceite de semilla de rosa mosqueta, se deriva del rosal rosa canina que se cultiva principalmente en Chile.
A diferencia del aceite de rosa, que se extrae de los pétalos de la rosa, el aceite de rosa mosqueta se extrae de la fruta y las semillas de la planta donde se concentran todas sus propiedades.
Es un cosmético muy valorado desde la antigüedad por sus apreciados beneficios curativos; está cargado de vitaminas nutritivas para la piel y ácidos grasos esenciales. También contiene fenoles que han demostrado tener propiedades antivirales, antibacterianas y antifúngicas. El aceite de rosa mosqueta a menudo se usa como un aceite portador para aceites esenciales que son demasiado intensos para ponerlos directamente sobre la piel.
El aceite de calidad superior se obtiene a través de sus semillas mediante una extracción en prensa fría para preservar todos los nutrientes.
La rosa mosqueta está llena de vitaminas, incluidas las vitaminas A, C, D y E que proporcionan una potente protección antioxidante a la piel
Además, es rica en ácidos grasos que ayuda en la regeneración de los tejidos y favorece una piel más joven.
¿Cómo puede el Aceite de Rosa Mosqueta beneficiar mi piel?
Combate los signos del envejecimiento
Muchas personas desconocen cuán poderosos son ciertos aceites faciales y cómo pueden reemplazar fácilmente los productos convencionales que tan popular se han convertido debido a la publicidad.
La rosa mosqueta cuando se combina con los mejores aceites transportadores deja una sensación agradable, ligera y no grasa en la piel, sin embargo, penetra profundamente para transportar antioxidantes que ayudan a contrarrestar el impacto negativo de los radicales libres sobre la piel.
Asimismo, las vitaminas A y C ayudan a estimular la producción de colágeno para reafirmar y tonificar la piel y reducir la aparición de líneas finas con el tiempo.
Protege contra los rayos UV
Los rayos UVA son increíblemente perjudiciales para la piel y una de las principales causas de envejecimiento e hiperpigmentación. Además, es uno de los principales causantes de cáncer de piel por lo que siempre se recomienda usar una protección solar adecuada.
El aceite de rosa mosqueta puede ayudar a fortalecer la barrera de la piel y ayudar a atenuar algunos signos de daño solar.
Asimismo, las altas cantidades de vitamina C son excelentes para aclarar la tez y las áreas de hiperpigmentación. Esta vitamina de belleza también puede ayudar a equilibrar la pérdida de colágeno en la piel como resultado de la exposición prolongada al sol.
Los ácidos grasos contra la inflamación de la piel
La rosa mosqueta es extremadamente rica en ácidos grasos esenciales como el ácido oleico, linoleico y linolénico vital para una piel sana y feliz.
Estos ácidos grasos son emolientes naturales que ayudan en la reparación de la piel y mejoran la flexibilidad. Estos beneficios de reparación hacen que la rosa mosqueta sea un ingrediente popular para desvanecer las cicatrices del acné u otros daños en la piel.
Además, tienen poderosas propiedades antiinflamatorias que ayudan a calmar las afecciones inflamatorias de la piel como el acné y el eccema.
Los investigadores descubrieron que el aceite de rosa mosqueta también contiene ácido retinoico natural (también llamado tretinoína, una forma de vitamina A) que los dermatólogos han recetado durante mucho tiempo en su forma sintética para el rejuvenecimiento de la piel.
El ácido retinoico natural que se encuentra en la rosa mosqueta funciona en sinergia con sus ácidos grasos para liberar de forma natural y lenta, eliminando el riesgo de sobredosis al tiempo que mejora la apariencia de la piel.